JIUTEPEC, MOR.- Sin morelenses en el abierto morelense de tenis que se libra en conocido club de esta localidad, porque el único que llegó al cuadro principal, Mauricio Astoerga, fue eliminado el lunes en singles y ayer en dobles, por lo que los locales serán convidados de piedra mientras que las autoridades del deporte no generen un programa que permita el surgimiento de talentos en el llamado deporte blanco, pero no se vislumbra la posibilidad de que sea en unfuturo inmediato, de hecho es imposible en los próximos cerca de tres años, con el régimen gubernamental encabezado por el tabasqueño perredista, Graco Luis Ramírez Garrido Abreu, quien disminutó en una tercera parte el presupuesto que se tenía para el deporte en el territorio tlahuica, en relación a lo que se contaba en el 2012, en el orden de 24 millones 724 mil pesos.

Resultados de ayer

El argentino Guido Andreozzi dio cuenta de Daruan King de Barbados 6-2 y 6-3, mientras que Jason Jung de Taipei, 6-3 u 6-2 al estadounidense, Saolu Bangoura, Alejandro González de Colombia pasó sobre el mexicano, Luca Gómez 6-2 y 6-2 y Philip Bester de Canadá al mexicano, Hank 6-3 y 7-6, dando la pelea en el segundo set, pero sólo para terminar con la derrota que con duignidad o no, es derrota como se vea.

El español, Roca Batalla pasó sobre el mexicano, Luis Patiño 5-7, 6-3 y 7-5, y ahí llevó al ibérico hasta la tercera vuelta y hasta hubo instantes en los cuales se pensó que la balanza podría inclinarse para el azteca, pero el fuereño terminó por imponerse; y el estadiounidenase, Krueger dio cuenta del morelense, Mauricio Astorga, 7-6, 5-7 y 6-1.

Así las cosas, de la segunda ronda en adelante, en singles, sólo se podrá disfrutar el tenis de los extranjeros, porque los mexicanos ya quedaron al margen de esta competencia.´por ciertgo, fue precisamente en un evento como ésxte, en el mismo escenario, cuando el gobernador, Graco Ramírez, recibió el primer abucheo que se recuerde, y ocasionó que el perredista se molestara tanto que hasta intercambio de palabras se dieron, perdiendo la cordura el tabasqueño.

Por Ignacio Cortés Morales