ZACATEPEC. El Selva Cañera recibirá a la escuadra de los Tigrillos de Chetumal, ya calificados a las finales del certamen de balompié de la segunda división nacional de la categoría de los nuevos talentos, por lo que podrían venir con sus suplentes, dado que en cada encuentro es un suplicio, puesto que se tiene que viajar desde la península hasta el centro del país, lo que es caro y cansado, por lo que, a dos jornadas de que concluya la etapa regular, bien puede ser que se envíe al escuadrón alterno, con la finalidad de evitar cansancio, estando tan cerca la fiesta por el ascenso.

Los Tigrillos

Los Tigrillos de Chetumal se encuentran en la cima del grupo dos de la divisional citada, con diez participaciones resueltas, de las cuales se llevan seis triunfos, 4-1 a los Zorros de Universidad Michoacana, 1-0 a los Lobos Prepa, 4-0 al Deportivo Nuevo Chimalhuacán y 1-0 a los Colibríes de Malinalco, y de visita, 1-0 al Deportivo Satélites y 3-2 a los Gladiadores, lo que testifica que fuera de casa las cosas no andan del todo bien, porque se tienen sólo dos victorias en esas condiciones, por cuatro en su territorio.

En cuando a los emparejes, 1-1 con las Garzas de Universidad de Hidalgo, sin anotaciones con el Spórting Canamy, y en la visita, 1-1 con los Toros del Atlético Celaya y sin goles con los Arroceros del Cuautla, y sin saber lo que es perder en este torneo, con 16 goles a favor pro cinco en contra, y no se ha recibido gol en los últimos tres cotejos, siendo los Gladiadores, en casa, los que más les han anotado a los Tigrillos, con dos, y los otros tres fueron en los primeros tres juegos, con Garzas y Toros en el 1-1 y los Zorros, en el 4-1 en favor de los peninsulares que estaban en su terreno, y en casa les han hecho dos y tres de visitantes, donde sólo llevan cinco en sus alforjas, otro indicativo de que fuera de casa no se está en plenitud de facultades, en cuatro juegos, para un total de 22 guarismos, siendo siete fuera de casa de los 16 que se han disputado, lo que representa menos de la mitad, con dos éxitos y dos emparejes y nunca h a ganado por dos goleas de diferencia en calidad de fuereños, así que los de la Selva Cañera pueden actuar tranquilos en esta batalla que será en casa, en cotejo que será de trámite.

Selva Cañera

De su lado, los números del conjunto de Selva Cañera son los siguientes, con dos triunfos, el 2-0 sobre el Deportivo Nuevo Chimalhuacán, en casa, en la jornada inaugural, y el mismo marcador, de visita, en la Bella Airosa, frente a Garzas de Universidad Autónoma de Hidalgo, en la fecha siete, y en cuanto a los emparejes, tres, en casa, 1-1 con los Colibríes de Malinalco y 2-2 y derrota en penales, 7-6 con los Toros del Atlético Celaua, y de visitantes, sin anotaciones con los Arroceros del Cuautla, en el estadio de la unidad deportiva Isidro Gil Tapia de la Heroica, y cinco descalabros, en casa, 3-1 con los Satélites, y de visita cuatro, 3-0 con Spórting Canamy, 2-0 con los patriotas de Córdoba, 2-1 con los Zorros de Universidad Michoacana y 4-1 con los Lobos Prepa, con diez goles a favor por 17 en contra, para una diferencia negativa de siete en este terreno, para diez unidades, buenas para estar en el escalón número once.

En casa se tienen cuatro participaciones, con un triunfo, dos empates y un descalabro, con seis goles a favor por seis en contra, para cinco guarismos de 12 que se tienen en disputa, lo que habla de que el torneo no ha sido nada bueno, lo que se había anticipado desde antes de que iniciara, porque se tenía a los mismos directivos y director técnico, y se debilitó al plantel, porque lejos de reforzarlo, después del fracaso en el evento de apertura, se le quitaron elementos, por lo que no se auguraba nada bueno y salió peor.

En el torneo pasado se llegó a 18 unidades en 12 confrontaciones, ahora, a lo más que se puede aspirar es a 17, lo que es factible, puesto que se le harán los honores a los Tigrillos Chetumal ya calificados y se visitará a los Gladiadores que se encuentran en el fondo del grupo dos de este circuito, así es que pueden ganarse las dos participaciones.

Por Ignacio Cortés Morales