CUERNAVACA, MOR.- El Galeana podría reaparecer en el balompié profesional, de acuerdo a la información que se dio a conocer ayer, después de que difícilmente se volverán a facilitar los derechos de este conjunto, a menos que sea en venta, y se tienen ofertas sobre el particular, pero también se puede quedar en Morelos y bajo la misma férula de Alejandro Villarreal Gasca y Raúl Ortega, dupla que dio tan buenos resultados que se llegó hasta la liga de ascenso, y de no ser por las presiones que se dieron desde las alturas del poder estatal, se continuaría con el proyecto, dando cabida a los futbolistas morelenses, como se hizo en su momento y dio resultados, como que se conservó en la divisional y el que descendió fue el cuadro que se hace llamar Zacatepec, con todo el respaldo financiero del acaudalado empresario, Víctor Sánchez Ayala, y el apoyo, por lo menos moral, del gobierno de Morelos.

Aunque no se ha oficializado nada, este rumor se dejó escuchar ayer con fuerza, y todo hace suponer que se romperá la liga con los Alacranes del Puente de Ixtla, y que se retomarán los trabajos propios, con la finalidad de volver desde sus orígenes, con la intención de volar a la liga de ascenso, con el tiempo, puesto que ya se conoce el camino y es cuestión de invertirle en buenos entrenadores, y se tuvo primero a Gregorio Yáñez Pineda, a Manuel Vidrio y a Enrique López Zarza, con quien se logró el ascenso al vencer a los Zaparos del Unión de Curtidores por la vía de los penales, para hacerse del título del torneo de clauaura, y se enfrentó y venció a los Murciélagos de Guamúchil, con facilidad, siendo los encuentros de ida en el estadio de la Unidad Deportiva Mariano Matamoros de Xochitedpec, pero no se pudo trabajar ahí en la liga de ascenso, sino que se fue al Centenario, en donde las autoridades del deporte, encabezadas por Jacqueline Guerra Olivares, exigieron que se pusiera el alumbrado adecuado para que se pudiera jugar de noche, pero resulta que también se empleó para el cuadro que se hace llamar Zacatepec, sin pagar nada por el alquiler, en un acto abusivo que fue tolerado por el gobierno estatal que supo de este hecho y se cumplió vía el citado Instituto del Deporte que tiene a su cargo el inmueble para disponer de é4l y obtener recursos.

Se facilitó el conjunto a Gregorio Yáñez Pineda, con quien se inició el proyecto hace diez años, pero desgraciadamente las cosas no salieron nada bien y no se calificó a finales, y después se entregaron los derechos a Julio Espín Navarrete para que se convirtieran en los Alacranes del Puente de Ixtla, y tampoco se llegó a las finales, lo que sólo sucedió una vez, en el primer torneo que se tuvo dentro del profesionalismo, y eso porque se tuvo a un jugador, sin saberlo, que conto con documentos alterados, pero ahora se quiere retomar la ruta triunfal hasta la liga de ascenso en pocos años, como que ya se logró en una oportunidad y se va por más, porque se cuenta con el suficiente talento como para lograrlo, pero debe ser despacio.

Habrá que esperar acontecimientos para saber cuál será la plaza que se tomará, pero, de antemano se sabe que no será el Centenario ni el Miraval, mientras se cuenta con Guerra Olivares al frente del Instituto Estatal del Deporte en Morelos, porque no les dejará el paso, o lo hará a precio de oro, por lo que, al recuperar la franquicia se tendrá que ir a un espacio en el que se le acepte sin problemas, bajo un pago moderado para que jueguen los jóvenes morelenses que lo consideren conveniente, porque serán los que tengan preferencia.

Por Ignacio Cortés Morales