Rio de Janeiro, Brasil- Muy cerca de la meta en la prueba de ciclismo de ruta en Río 2016 se llevó a cabo una detonación controlada de una mochila que generó sospechas en la Policía Federal brasileña.
Al final resultó una falsa alarma debido a que la mochila, abandonada sobre un contenedor situado detrás de la meta, contenía ropa y otros objetos personales.
El equipo policial fue alertado por una vecina que vio la mochila desde la ventana de su departamento, frente a la playa de Copacabana. La Policía Federal brasileña hizo explotar la mochila a distancia a través de un artefacto compuesto con agua y cables detonadores.
La zona, que fue acordonada para restringir el paso de la gente, fue rápidamente liberada antes incluso de que los ciclistas llegaran a la meta.
Por Geraldine Chávez