TENERIFE, ESPAÑA.- Para estar en los Juegos paralímpicos de Río de Janeiro, Brasil, el próximo año, debe estar dentro de las primeras cinco del mundo, afirmó la nadadora morelense, Patricia Valle Benítez, al seguirle la trayectoria por este medio, desde donde se encuentre, y ahora está en esta ciudad, con la preparación intensa, y añadió que de hacer el tiempo con el que impuso marca americana de un minuto, un segundo y 90 centésimas, considera que estará con el pasaporte para la magna justa del año venidero.

Valle Benítez indicó que para las categorías bajas (de acuerdo al tipo de lesión que se tiene) se tiene que estar entre las primeras cinco del mundo, y para las altas, se debe estar entre las primeras ocho, y ella está en las bajas, en S3, por lo que le corresponde estar entre las primeras cinco, y su prueba máxima es la de los 50 metros pecho, en donde ya dio un minuto, tres segundos y 90 centésimas, es decir, exactamente dos segundos más de lo que es su mejor tiempo, y todavía tiene 16 días para llegar al día de la competencia, lo que será el 17 de los corrientes, en donde va a lanzarse a la alberca con toda la decisión de que es capaz para imponer condiciones, con todo y que no se debe olvidar que viene de una intervención quirúrgica, pero la atleta morelense es de las que se crecen al castigo y se va a lanzar con todo en busca del pasaporte a Río en 2016.

Patricia Valle, la mejor exponente de la natación para personas con capacidades diferentes, tiene “secuelas de polio desde el tórax, ambas piernas, y un hombro”, por lo que su estatus es de S3, siendo una guerrera dentro de la alberca, en cada competencia, por lo que se repuso de una intervención quisrúrgica, hizo una rehabilitación, empezó sus entrenamientos y ya se encuentra cerca de los primeros lugares, por lo que se tiene confianza en que en el campeonato mundial de la especialidad, en Glasgow, Escocia, del 16 al 19 de los corrientes, esté entre las cinco mejor calificadas, y con ello lograr el pasaporte a los Juegos Olímpicos de Brasil, lo que tiene como objetivo, además de que después de este campeonato mundial, estará en Toronto, Canadá, para el certamen de los juegos Parapanamericanos, en donde espera conquistar varias medallas, para lo cual está intensificando su preparación, el ritmo es importante, y se espera que atanto para una como para otra competencias, se alcance el grado óptimo, para lo cual se requiere de toda la concentración, lo que está poniendo, y sólo tiene tiempo para comer, dormir y entrenar en este hermoso lugar, del que sólo hay dos en el mundo para esta clase de preparación para los atletas de alto rendimiento, como es el caso de la joven sirena.

Lo único que tiene preocupada a la atleta es que su celular tiene problemas, por lo que no se puede comunicar con sus hijas que están en México, y todavía falta un buen trecho para retornar a la patria, por lo que espera que alguien le mande un aparato para volver a estar en contacto con su familia, de acuerdo a lo dicho por la campeona y recordista mundial en distintas especialidades, con medallas de todo tipo y con marcas que son una envidia para todos loas deportistas, tanto que si sus logros fueran en el fútbol, las televisoras le harían un seguimiento segundo a segundo de su vida, porque para ese medio de información, sólo lo que deja dinero es lo que se toma en consideración y se le brinda toda la atención, con todo y que, como en el caso del balomopié, al final del cuento son más ,los descalabros que las cosas positivas, pero la afición lo perdona todo y al siguiente evento ahí se encuentra nuevamente frente al televisor o en lso estadios, aunque el espectáculo deje mucho qué desear, como acontece casi siempre, pero pronto se olvida el pasado, por reciente que sea y a seguir con lo que viene, cuando que hay otros atletas, otros deportes, con mayores logros, con más triunfos, y no son tomados en cuenta en la medida de las necesidades que se tienen.

Por Ignacio Cortés Morales